jueves, agosto 31, 2006

Llegó a pensar que el problema había surgido durante su adolescencia, allá cuando cursaba la secundaria y se juntaba con un grupito de niñas grises. Yendo todavía más atrás, se dió cuenta de que siempre había tenido tropiezos en su trato con la gente. Siempre había estado presente el desdén, los pretextos, los desencuentros. Tuvo una amiga en primaria a la que le hablaba por teléfono por las tardes. El día que la amiga le dijo que tenía que colgar porque su mamá iba a ocupar el teléfono ella no le creyó. Colgó pero volvió a marcar para averiguar si estaba ocupado. No lo estaba. Le mintieron. La amiga contestó, un tanto desganada y ella reclamó por la mentira. "No, en serio mi mamá iba a usar el teléfono, pero como marcaste..."
Recuerda, una nota al niño que le gustaba. Nota por la que fue reprendida por una maestra asustada. Una apuesta entre dos niños para lograr hacerla su novia... La secundaria, compañeros fresas, adninerados o supuestos adinerados. Niñas rubias de bonita letra y buenas calificaciones. Su grupo de amigas, sin dinero, con regulares calificaciones y ella, la de peor letra. Se enamoró perdidamente de un amigo de sus primos. Duró así como cuatro años. Le hizo la confesión al chico aquél pero éste le saliò con que no podía corresponderle.
En la prepa, tampoco tuvo muchos amigos pero las calificaciones mejoraron sobremanera. Con su primer novio se dio cuenta de que los hombres eran muy hormonales y se alejó de él. En la universidad emigró a otro estado, para respirar nuevos aires. Ahí no hubo novio, ni necesidad de hacerle la plática a ningún chico. Al salir de la universidad se dio cuenta de que había dejado su grupo de amigas allá, en el estado donde había ido a estudiar, y que en su pueblo natal no conocía a nadie. Su vida social se trataba de hacer mal tercio cuando su hermana salía con el novio. Así volvió a encontrar a un amigo de la infancia, uno que hace mucho no veía y que no le hablaba. Uno que fue novio en la primaria de la amiga a la que ella hostigaba por teléfono. Lo invitó a su fiesta de cumpleaños y empezaron a salir. Ella se deslumbró con él. Disfrutaba mucho estar a su lado, ir al cine, tomar un café, comer juntos, pasear... Y otra vez confesó que él le gustaba. No sirvió de nada. Él, aconsejado por mamá, le dijo que no podían szer otra cosa mas que amigos porque no podía ni quería hacerle daño. Patrañas. Después algo sucedió. Hoy se sigue preguntando a ciencia cierta qué fue. Él dejó de devolverle llamadas y contestarle mensajes. Ella se sintió infectada por el peor de los virus. Escuchando pretextos, esperándo salidas que jamás volvieron a ocurrir.
Habría sido por la declaración? En qué se había equivocado? Era una encimosa? Por qué siempre el desdén? Tal vez el problema no surgió en su adolescencia... si no más atrás.

martes, agosto 29, 2006

Discos

que vale la pena escuchar completos:

Absolution de Muse
Apocalyptica plays Metallica by four cellos
Infame.- Babasónicos
Sesión futura de Lucybell
Once more with feeling.- Placebo
Play.- Moby
Great expectations (soundtrack).- Varios
Stars: The best of the cramberries.- The cranberries
11 episodios sinfónicos.- Cerati

Deben faltarme algunos, pero de momento son los que vienen a mi mente.
¿Cuál es la selección de ustedes?

domingo, agosto 20, 2006

Su único problema

... por no poder conseguir alas en otro lado
el hada siempre termina enamorándose de sus amigos.
Grave error.
Las alas así no llevan a ninguna parte.

martes, agosto 08, 2006

del poeta fer con h

Amor mutante
amigos con derecho y sin derecho de tenerte siempre
y siempre tengo que esperar paciente
el pedazo que me toca de ti...